FUGAZ

 Foto: @mariano.ferbaz

Texto: Rosae

Sonrió.

Satisfecha, aunque no feliz.

Agradecida de que la vida le hubiera dado la oportunidad de disfrutar y compartir momentos de buena conversación y placer con alguien tan interesante.

Un adiós largo. Un “ya nos veremos” que dio por bueno, aunque sabía bien que era una frase formal con sabor a final.

Mordiendo su rabia agradeció al destino haber coincidido en tiempo y espacio con esos ojos profundos e intensos, que probablemente no volverían a mirarla.

Y sonrió porque había sucedido.

Guardaría ese recuerdo junto al de tantos otros que le habían hecho sentir bien y volaron.

Momentos pasados que nunca volverían.

Y sonrió.

La vida continuaba; pero siempre recordaría aquel día en que el mundo se detuvo sólo para que ella lo disfrutara.